Eres importante

Verte así.

Saber lo que vales, lo que eres capaz, lo que sufres, lo que sueñas, y verte así.

Saber todo el daño negligente que sufriste en la niñez, y que aún persista bajo el tupido velo que necesitó tu mente para continuar viviendo.

¿tú estás preparado para hacerla consciente?

¿Cómo puedo ayudarte?

Ideas, imágenes, diferentes formas de acercarme y hacerte saber la maravillosa persona en la que te has convertido. Pero tú aún, esperas la aprobación de otros, el visto bueno de ellos, la palmadita en la espalda diciéndote que lo has hecho bien. ¿Y si nunca llega? ¿Y si no tienen la capacidad de verlo?

…”En ti debes creer, cuando el mundo no lo haga ya”…

Tú crees que no es necesario remover el pasado, pero es ese mismo pasado el que programa tu presente. El que hace que seas como eres, como piensas, como te relacionas con el mundo.

Removerlo implicaría ordenarlo, entenderlo, cambiar tu presente y con ello tu vida.

Eres importante, muy importante. Vales mucho más de lo que crees.

Atrévete a ser el responsable de tu vida, de tus cambios, de tus elecciones, aciertos y errores. A vivir la vida a flor de piel, sintiendo, emocionándote, vibrando con las sensaciones que podemos llegar a sentir si te permites, ser quien quieres ser.

Estoy aquí, para mí, tú eres importante.

El amor en tiempos de coronavirus

Convivir 24 horas con tu pareja y no manejar adecuadamente los tiempos y espacios es perjudicial para la relación.

Hay otras parejas, que no están las 24 horas juntas, pero uno de ellos es el que se encarga del cuidado de los niños, o de la casa y echa en falta, a la otra persona de la pareja, suele pasar que cuando regresa a casa el que ha tenido que salir, o cuando regresa al espacio familiar, el que ha estado trabajando en su despacho ocho horas (o más) lo único que recibe son quejas, reproches, y se crea un intenso malestar en la pareja y en la familia. No solo por los reproches, sino también se suma las preocupaciones que este tiempo deposita en nuestra mente (preocupaciones económicas, laborales, planes, familiares, alguna persona conocida que este infectada, el curso escolar, máster en marcha….).

En situaciones así, nuestra cabeza no para si no la ayudamos a parar, y para eso necesitamos tiempo.

Por eso es muy importante intentar mantener los espacios y el tiempo que cada uno necesita.

Yo los llamo espacios de autocuidado.

Y esto hay que hablarlo, decidir entre los dos cuánto tiempo libre van a tener cada uno para estar con uno mismo. Y ese tiempo, tiene que incluir un espacio, en el cual uno podrá hacer, solamente, lo que le haga bien.

Ideas tenemos un montón, escuchar música, leer un libro, mirar una serie, ducharse, hacerse una mascarilla facial, hablar con amigos, dormir una siesta, o simplemente estar solo sin hacer nada.

En lo que cada uno gaste su tiempo, el otro no se puede meter, no puede juzgar, no puede opinar. Es un tiempo solo de uno.

Creo que son detalles en los que tenemos que pararnos a pensar.

No solo queremos salir vivos de esta pandemia, también queremos seguir juntos.

Mucho ánimo a todos y quédense en casa.